lunes, 23 de junio de 2014

Jukebox

Hace unos días me pase por mi antiguo barrio, entre en un bar donde yo antes paraba a menudo, pero nada era igual, quitando la barra y una pequeñísima parte de la decoración. Todo era nuevo, incluso los dueños, pedí un café y mientras me lo tomaba fui repasando el local con la mirada, me fije en un tipo que estaba sentado en una de las mesas del fondo, al principio dude, pero al rato aunque estaba muy cambiado, lo reconocí, era, llamare Bruce. Cuando pague mi café le pedí al camarero que me cobrara también el de Bruce, en ese momento el hombre pego un grito, Bruce estas invitado por este, Bruce levanto la mirada del periódico que estaba leyendo y me miro fijamente. No reconocí ese mirada, la mirada que yo recordaba era fría como el hielo, esta era como la de un cachorro indefenso. se acerco y me dijo, no te recuerdo ¿quien eres?, intente explicarle mi relación con el, pero me fue imposible, parecía que habían reseteado su cerebro, lo siento, comento, no te recuerdo, pero me alegro de verte y gracias por la birra. Mientras salia del local el camarero comento, no se como era antes, pero ahora es como un zombi, seguí mi camino con lágrimas en los ojos. Corrían principios de los ochenta y el piso donde vivíamos quedaba en medio de tres barrios de La Coruña, hacia abajo el del poblado que ya comente, hacia arriba uno con una playa, pequeña, pero playa, hacia un lado otro que quedaba mas al monte, monte y playa , quien quiere mas. Mi zona no tenia nada de las anteriores, pero no le faltaban ni bares, ni gente de dudosa reputación. Un bar donde paraba gente de este tipo era el Apolo, muy cercano a donde mi pandilla jugaba al fútbol, vamos que nuestro estadio era la calle y el césped el puro asfalto. Solíamos pasar muchas tardes sentados un las escaleras de un portal cercano al Apolo nos gustaba estar cerca de esos chicos malos, y nos gustaba que los vecinos pensaran que eramos de la misma banda, jugábamos a ser rebeldes. Desde nuestra posición era fácil oír tanto conversaciones, como la música que salia del interior del local. Una tarde callo una tremenda granizada que nos obligo a resguardarnos en el interior del bar, una vez dentro no me quedo ni un rincón por mirar, una vez fuera seria capad de hacer un inventario de todo lo que había dentro, tanto cosas, como gente. A primera vista era un bar distinto a resto del barrio, la clientela era joven, y hablaban mas de lo que bebían, por cierto poco de fútbol, lo digo por que en los otros bares era el tema estrella, bueno era el tema. Todo en el local era nuevo para mi, todo menos la música que salia de una vieja maquina de discos, mas Chichos, mas Chunguitos, etc, mas de lo que escucha mas de la mitad del barrio. Un día comentare algo sobre el mundo De La Loma, para que os hagáis una idea, cuando en una de sus películas la policía detenía a uno de los protagonistas, la sala del cine se llenaba de abogados defensores, con una escena de persecución, la reacion era, como decirlo, pondré un ejemplo, la escena de la película de los Gremlins cuando están en el cine del pueblo, pues así, una locura. Me acerque a la maquina de discos para leerlos títulos de las canciones, nada de nada, todos los papelitos estaban en blanco, mientras me daba la vuelta, hice un gesto con la cabeza, como de no entender nada, en ese momento oí una voz, la maquina del Apolo esta personalizada, ahí música buena, muy buena y excelente, la voz era de Paco, dueño del local. Paco era un tipo de unos 40 años, con pinta de rockero retirado, la mujer era como el polo opuesto, siempre me acuerdo de ellos cuando veo una foto de Lennon y Yoko. Podéis entrar cuando queráis, nos dijo, pero para los menores no ahí ni alcohol, ni drogas, eso que os quede claro, y volví, claro que volví, mi relación con el local duro cerca de dos años, hasta que cerro. Pasaron semanas hasta la primera vez que vi a Bruce en el local, siempre acababa saliendo su nombre en todas las conversaciones que tenían los clientes, pero el casi no venia por allí. Era conocido en el barrio por que se decía que estuvo en Carabanchel, por un tema de tiroteo con la autoridad, también por ser uno de los primeros en tontear con sustancias prohibidas, eso puede explicar su estado actual. La mayoría de consumidores no tuvieron tanta suerte como el, era normal que en cada dosis solo se utilizara un 10% de de sustancia, el resto solía ser harina, o bicarbonato, o polvos de talco, incluso ladrillo de obra machacado, si ladrillo, así es que a la mayoría de consumidores de aquella época se les puede localizar fácil, están en los cementerios de la ciudad. Pocos fuimos los que no caímos en ese mundo, pero Paco ya me lo había dicho, para poder estar aquí dentro, ni alcohol, ni drogas, y en el caso contrario se apaga la música, yo me aficione al kas de limón. A los pocos días de mi primera visita al local Paco me explico el funcionamiento de la jukebox, de la A a la C, todo gitanada, pasa de ella si quieres, de la D a la F, gloria, y de la G a la I, cuidado que eso engancha. Comenzaremos con la D-4, ¿conoces a los Rollings?, me pregunto, pues claro, conteste, pues esto seguro que no, se llama "angie", puedo decir que aun hoy me parece la mejor canción de ese grupo. ¿estas deprimido?, pues E-5 puede con cualquier problema, "hotel california", solo van dos y ya me siento como ali-baba cuando encontró la cueva. Hoy estoy contento, G-1 Chicago, E-9 la voz, una tal Janis Joplin, que va, ese de la cueva encontró basura comparado con esto. F-7 The Doors, G-6 Genesis, que locura, adoro esta maquina, H-2 "la casa del sol naciente", me rindo. Según iba tocando teclas aparecían mas y mas temas, hoy lo dejo aquí, pero os prometo que esta no sera mi ultima visita al Apolo.
Y ahora las notas de hoy. Como primer grupo he elegido a Chicago, me había olvidado de ellos, pero hace unos años en un viaje que hice a Francia, estando en el hotel puse la tele, comenzaba en ese momento un programa presentado por Chris Isaak, como invitados un grupo liderado por un músico que toca un tronbon de varas, algo raro pero muy original, hoy se les llamaría una big-bang. El grupo era Chicago y tocaron temas que hacia años que no escuchaba, fue muy grato el devolverlos a mi vida. He elegido un vídeo donde no solo están ellos, también sus clones Earth Wind and Fire, una autentica pasada, recomiendo apreciar la diferentes maneras de tocar la guitarra desde el minuto 2:15. Que puedo decir del segundo, pues poca cosa, el titulo lo dice todo "hotel california" de los Eagles, quizás el tema con el mejor toque de guitarras de la historia, inconfundible. El tercer tema es del grupo America, habrá quien no los conozca, pero es escuchar el principio del tema "a horse with no name" para darse cuenta que es un tema que siempre estuvo ahí, aunque no supiéramos de quien era. El cuarto y ultimo es un himno para mucha gente, "la casa del sol naciente" The Animals, con un Eric Burdon pletorico, tanto como joven. Pensareis que me olvide de un tema, pues no, "angie" de los Rollings vendrá otro día, con una entrada dedicada a ese grupo. Hasta pronto.


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